Veinticuatro árboles -entre ellos el ulmo, el alerce, la araucaria, el espino y el copihue- al borde de la desaparición y 179 grupos vegetales con serios problemas de preservación dan cuenta de un preocupante escenario gatillado por incendios forestales, podas mal realizadas, proyectos de inversión y el descuido e ignorancia de la comunidad.
La instalación de grandes proyectos de inversión, así como pequeñas faenas productivas -extracción irracional y desinformada de leña, tierra de hoja y plantas medicinales- son responsables de que más de un centenar de árboles y plantas autóctonas chilenas estén bajo amenaza o en peligro de extinción.
Eso sin contar, por cierto, con la expansión urbana y sobre todo con la incultura, descuido y hasta mala intención del cuidadano común y corriente, responsable de más del 99% de los incendios forestales que arrasan cada año con plantaciones de bosque nativo. Así lo afirmó ayer el director de Conaf de la Región de O’Higgins, Francisco Mendoza, junto al director de la Escuela de Gobierno de la Universidad Iberoamericana (Unicit), Marco Rodríguez, quienes llamaron a la población a proteger nuestro patrimonio natural.
“Los ecosistemas siempre salen perdiendo frente a proyectos de desarrollo económico”, sostiene Mendoza y lanza un claro ejemplo en su región. “Muchas viñas están produciendo sus mejores vinos sobre cierta cota. O sea, están subiendo por los cerros y eso está afectando el bosque nativo esclerófilo”, comenta.
Sin embargo, afirma, también hay actos irracionales a menor escala que hacen lo suyo: “La gente que extrae boldo por sus características medicinales lo hace sin ningún tipo de manejo, el que tira la colilla sin contemplación y provoca un incendio o municipios que tienen en algunas de sus plazas especies autóctonas y que mandan a podar en forma lacerante y sin conocimiento, provocando su muerte en la mayoría de los casos”.
Aunque -aseguran- en la actualidad, el número total de especies con problemas de conservación no está claro, debido a la aparición de nuevas variedades o de la inmigración de algunas de éstas a otras zonas, el “Libro rojo de la flora” -elaborado por Conaf- clasifica 179 grupos vegetales (del Chile continental e insular) en las categorías Peligro de Extinción, Vulnerable, Rara y Amenaza Indeterminada.
El problema, dice Mendoza, es que varias de ellas están sin ningún tipo de protección especial. “Sólo en la Región de O’Higgins hay 20 sitios que debieran ser prioritarios desde el punto de vista de la protección y conservación, sin embargo, sólo tenemos una reserva, lo que hace que la tarea de preservación de nuestra naturaleza se vuelva titánica”, dice.
Planes a nivel local
¿Qué hacer? El director de Conaf pone sus fichas en la educación de la población, más que en leyes y megapolíticas, donde siente ya hay avances importantes con la Ley de Bosque Nativo y la de Bases del Medio Ambiente. Pese a ello, considera que la fiscalización es crucial, especialmente para evitar la tala de especies protegidas.
“Junto a la universidad (Unicit) estamos formando monitores ambientales para que logren en la población acciones conductuales positivas tendientes a terminar con prácticas que dañan nuestro ecosistema. Porque creemos que esto no se soluciona con acuerdos internacionales de alto nivel, sino con acciones a nivel local. Estoy convencido que una sumatoria de pequeñas acciones pueden proteger nuestro patrimonio natural”, dijo Mendoza, que ya cuenta con dos proyectos regionales para educar a la comunidad: “Adopta un árbol” y “Ciudad Bosque”.
En todo Chile
Once especies de plantas distribuidas en Chile continental que están en Peligro de Extinción y 31 especies de flora continental en estado Vulnerable, cuya distribución geográfica se concentra desde la Región de Arica y Parinacota hasta la Región de los Lagos.
Treinta y dos especies (como el coralito del norte) se encuentran hoy en la categoría rara, es decir, cuya población aparentemente siempre ha sido escasa o son variedades con distribución muy restringida. Estas se ubican a lo largo de Chile continental.
En la parte de Chile insular, en tanto, hay 63 especies de plantas en Peligro de Extinción, siendo el archipiélago de Juan Fernández el más afectado, y dos especies con Amenaza Indeterminada, esto quiere decir que son plantas que se suponen incluidas en la categorías en Peligro de Extinción o Vulnerables, pero cuya situación definitiva se determinará de acuerdo a futuras investigaciones. Estas especies son la Agrostis masafuerana y la Carex berteroniana, ambas crecen en la isla Alejandro Selkirk.
Los árboles amenazados
Alerce cahuén
Algarrobo
Araucaria
Avellano
Belloto del Norte
Boldo
Bollén
alafate
Canelo
Ciprés de la cordillera
Ciprés enano
Coigüe
Colihuay
Colihue
Copihue
Chagual
Chilco
Espino
Guayacán
Guindilla
Guindo
Santo Olivillo
Roble
Ulmo