El boom de la construcción no para. Cada semana se edifica un área del mismo tamaño de París. Tratándose de un sector tan pujante, ¿no es tiempo de hablar de su responsabilidad en el cambio climático? ¿y en cómo debería adaptarse para ser sostenible?
Hay que decirlo: esta actividad es de las que más contaminantes, porque genera un escalofriante 37% de las emisiones de gases de efecto invernadero a nivel mundial. Esto es así porque es una industria que utiliza cemento, acero y aluminio, materiales que por sí mismos conllevan una importante huella de carbono.
Te compartimos algunos datos para entender por qué es tiempo de crear y elegir otras maneras de edificar.
Materiales de construcción y cambio climático, una relación tóxica
Sabemos que para frenar el calentamiento global debemos cambiar la forma en que llevamos adelante nuestras actividades como sociedad. En este sentido, sólo haciendo que la sostenibilidad sea una cualidad transversal a todas las áreas lograremos un futuro justo y verde para todos los seres del planeta.
La construcción no puede quedar fuera de esta meta. Es tiempo de repensar la forma en que levantamos los lugares que habitamos para que la presión sobre la naturaleza sea mínima, para contaminar menos y también, para vivir mejor.
Los especialistas plantean que ya no basta con la visión clásica que busca moderar las emisiones derivadas de la calefacción, la refrigeración y la iluminación de los edificios. Hay que anticiparse a eso e ir al momento en que se decide con qué y cómo se construirá.
Es por esto que es urgente generar soluciones innovadoras para que el diseño, producción y utilización de materiales, como el cemento, el acero y el aluminio, sean lo menos contaminantes posibles.
Para lograr descarbonizar los materiales de construcción hay tres estrategias generales que deben aplicarse conjuntamente:
Evitar la extracción y producción innecesarias.
Cambiar a materiales de construcción renovables.
Mejorar la descarbonización de los materiales de construcción convencionales.
El documento propone otras formas para hacer más sostenible al sector como integrar madera, el bambú y la generación de energía por biomasa, lo que ayudaría a evitar 40% de los emisiones para 2040. O bien hacer foco en los desechos aplicando una visión de economía circular que permita evitar su generación.
Repensar la forma de construir: la bioarquitectura, otra forma posible
Para alimentar la imaginación y entender que hay maneras distintas de erigir ciudades, traemos el ejemplo de la bioarquitectura que nos demuestra que construir puede ir más allá del lucro y volver a su esencia: crear espacios saludables y disfrutables poniendo a las personas en el centro.
Esta variante de la arquitectura se enfoca en utilizar nuevas alternativas, innovar o recuperar tecnologías ancestrales para superar los problemas de agresión y daño ambiental creados por los modos actuales de diseño y construcción.
Quienes adhieren a la bioarquitectura buscan diseñar, construir y mantener hábitats sustentables y sostenibles. Desde esta visión, edificio, habitantes-usuarios y ambiente constituyen una unidad indivisible que debe ser atendida mediante la utilización de sistemas constructivos coherentes con los adelantos y el confort actuales, pero sin perder de vista que el objetivo final: la salud y el bienestar integral de quienes harán uso de esas construcciones, considerando incluso la vida de las generaciones venideras y el futuro de su ambiente.
En definitiva, se trata de recordar que los lugares donde transcurre nuestra vida deben ser saludables, disfrutables y adecuados para albergar todas nuestras actividades. Para eso, no sólo sustituyen los materiales tóxicos o peligrosos por otros naturales y no contaminantes, sino además para alcanzar la mayor eficiencia energética posible y el mayor ahorro de materias primas, con sus consecuentes beneficios económicos y ecológicos.
Debemos poner estos temas en debate hoy más que nunca. Porque de cara a un futuro que tendrá clima extremo, seguir construyendo nidos de cemento en ciudades cada vez más grandes y sin naturaleza no es saludable para las personas ni para el planeta.
Ya llega un nuevo Dieciocho. Tal vez en estos días te ocurra lo mismo que a mí, en que la emoción me embarga y me lleva a la reflexión.
Paseo Bulnes, frente al Palacio de La Moneda en Santiago.
Hace más de 200 años, en 1811, se conformó la Primera Junta Nacional de Gobierno y nos sacudimos el yugo de la Corona española. Así, dimos nuestros primeros pasos como nación y comenzamos un largo camino de autonomía.
Con el transcurso de la historia, aprendimos que tanto la independencia como la libertad no son valores que se ganen de una vez y para siempre. Por el contrario, deben enarbolarse en cada acción y defenderse a cada momento. En especial ante el embate de nuevas y sutiles formas de dependencia que van apareciendo.
El aporte de Greenpeace a la lucha por la independencia
MY Esperanza llegando a los glaciares Pio XI y Amalia, en la Patagonia.
Desde Greenpeace sabemos muy bien lo que significa la independencia, pues está en nuestro corazón. Jamás aceptamos aporte de empresas, gobiernos ni partidos políticos, y eso es lo que nos permite actuar de manera libre.
En este sentido, este Dieciocho es un buen momento para recordar todo por lo que hemos luchado (y conseguido) juntos:
Después de años de impulsar las campañas #ChileSinPlásticos y #ExigeAlternativas logramos la aprobación de la ley que prohíbe las bolsas plásticas y de la ley que regula e impide la entrega de artículos de plástico de un solo uso.
Junto a miles de personas pudimos detener el proyecto HidroAysén y evitar la construcción de cinco mega represas en la Patagonia chilena.
Conseguimos el cierre definitivo de Mina Invierno luego de 10 años de lucha junto a la comunidad local de la Región de Magallanes.
Logramos detener diferentes proyectos salmoneros en la Región de Magallanes.
Junto a diversas organizaciones conseguimos en 2008 que el Congreso aprobara por unanimidad el proyecto de ley que declara a Chile ¨Zona Libre de Caza de Cetáceos¨.
Celebrar nuestra esencia
Quiero compartirte una guía con recetas chilenas típicas. Hay platos y también algunos tragos, porque para cuidar al planeta hay que cultivar la alegría ¿y qué mejor que tener la panza llena y el corazón contento?
Una ciudadanía despierta e independiente para elegir su futuro
Paisaje de Aysen, XI región en Chile.
Hoy más que nunca, en este mundo es importante recordar lo mucho que costó conformarnos como nación libre e independiente. Lo digo porque desde hace ya varias décadas un grupo concentrado de hombres poderosos y transnacionales, que hacen negocios explotando a la naturaleza, parecen ser los únicos capaces de dictar el rumbo del planeta.
De esta manera, el destino de la humanidad está atado al 1% más rico y a su desenfreno codicioso. Nuestros territorios y mares son zonas de sacrificio si así lo quieren y la autodeterminación de los pueblos y las licencias sociales quedan como meros conceptos que los poderosos pasan por alto.
Pero esto no tiene por qué ser así. Aunque nos nublen con desinformación y negacionismo, no debemos olvidar que existe una solución. La salida es colectiva y nace de reconstituir nuestra relación con el entorno natural, de volver a sus ritmos y dejar atrás la aceleración de una economía que devora todo a su paso.
Área Protegida Francisco Coloane en la región de Magallanes. En el marco del Ship Tour 2018 del barco Arctic Sunrise realizado en Chile en apoyo a la campaña para proteger los mares patagónicos de la expansión de la salmonicultura.
Otra sociedad es posible si nos reconocernos como parte de la trama viva compleja y maravillosa de este mundo que nos cuida y a la que debemos cuidar. Mostrar respeto por la tierra en la que habitamos es una de las mejores formas de empezar a ver las cosas desde este nuevo lugar.
El ecopoeta que nos inspira a seguir luchando
Hablando de estos temas, siempre viene a mi un poema del admirado Nicanor Parra, (quien también fue profesor, físico e intelectual) que dice así:
ESTIMADOS ALUMNOS
adiós estimados alumnos
y ahora a defender los últimos cisnes de
cuello negro
que van quedando en este país
a patadas
a combos
a lo que venga:
la poesía nos dará las gracias (1983: 158).
Nicanor, con su sensibilidad, se anticipó a los tiempos y a los problemas que esos poderosos trajeron a nuestro ambiente/hogar. En este caso particular, estas líneas vaticinaron -20 años antes- el desastre ecológico del río Cruces en Valdivia, en el 2005, que provocó la muerte masiva de cisnes de cuello negro.
Pero sin dudas, lo que más me moviliza de toda la obra del poeta es que apela a algo que puede denominarse como “conciencia de especie” (a entendernos unidos como tribu.) Además de que nos habla del planeta como un lugar finito que debe preservarse.
Desde fines de los años 70, Parra nos alertaba que nuestra casa estaba en peligro, mucho antes de que sonaran las alarmas.
Mi deseo es que la independencia, que defendemos día a día, nos guíe para tener la visión clara y la voluntad fuerte para hacer lo que dijo Nicanor: defender lo que va quedando en este país/planeta, “que la poesía nos dará las gracias.”
¡Disfruta de estas Fiestas Patrias!
Nos seguimos encontrando para construir la nación (y el mundo) que soñamos.
Sin embargo, no existe un nivel seguro de exposición a la contaminación atmosférica, ya que el aire sucio puede provocar una amplia gama de enfermedades, como enfermedades pulmonares, cardiopatías, accidentes cerebrovasculares y cáncer.
Sin embargo, a pesar de las advertencias y de los riesgos para la salud de millones de personas, los gobiernos y las empresas que alimentan la crisis de la contaminación atmosférica no hacen lo suficiente para atajarla. Esto ha dado lugar a un creciente movimiento popular mundial que defiende el aire limpio y exige soluciones locales como el control de la calidad del aire, el desarrollo de un transporte público sostenible y la ecologización de nuestro sector energético.
Conozcamos y celebremos a algunos campeones y campeonas del aire limpio que se están levantando y luchando contra la contaminación atmosférica, al tiempo que inspiran y empoderan a otros en sus comunidades.
Tailandia – Participación de los conocimientos indígenas en la lucha contra la contaminación atmosférica
Tailandia sufre el impacto de la contaminación atmosférica, y su región septentrional experimenta anualmente una neblina de nivel peligroso. Las principales fuentes de contaminación son las quemas agrícolas estacionales para alimentar a los animales y limpiar la tierra, con nubes de humo y contaminantes atmosféricos que se extienden por todo el país y contribuyen a la contaminación industrial y de los vehículos de motor existente en las ciudades. La situación ha empeorado especialmente este año, con Chiangmai, ciudad del norte del país, clasificada como la más contaminada del mundo por la empresa suiza de calidad del aire IQAir.
Prue Odochao pertenece al grupo indígena pgakenyaw y vive en el distrito de Samoeng, en Chiangmai. Como agricultor, depende de los bosques, los ríos y la naturaleza para subsistir y alimentarse a diario. Lidera la lucha de su comunidad por proteger sus derechos y su modo de vida.
Explica que los distintos pueblos indígenas de la zona tienen tradiciones culturales relacionadas con prácticas de quema controlada que se han transmitido de generación en generación, pero el problema de la neblina tóxica en el norte de Tailandia no surgió hasta las dos últimas décadas, coincidiendo con la expansión de la agricultura del maíz para el ganado en la zona.
“La capacitación de la sociedad civil que respeta la diversidad de modos de vida y culturas, incluido el reconocimiento de los derechos humanos de los grupos étnicos indígenas, es tan importante como salvaguardar el medio ambiente y la salud. Este empoderamiento es crucial para abordar los problemas de contaminación atmosférica”, afirmó Prue, cuya esperanza es que la sabiduría y los conocimientos de los pueblos indígenas se tengan en cuenta a la hora de abordar la contaminación atmosférica.
Tailandia – Defender el derecho de la población a saber
Penchom Saetang es la Directora Ejecutiva Fundadora de Ecological Alert and Recovery-Thailand (EARTH), una organización sin ánimo de lucro centrada en la contaminación industrial. Desde 2001 aboga por la ley del Registro de Emisiones y Transferencias de Contaminantes (RETC) para reducir la contaminación de las industrias. El objetivo del PRTR es informar al público sobre los contaminantes industriales que se liberan y que pueden afectar a su salud.
Su activismo comenzó en 1998. La comunidad de la zona de Map Ta Phut, en Rayong, provincia del este de Tailandia, estaba preocupada por el humo y los olores procedentes de una central de carbón cercana. Junto con Greenpeace Tailandia y Global Community Monitor, Penchom había recogido y enviado muestras de aire a un laboratorio de Estados Unidos. El laboratorio detectó 30 compuestos diferentes, entre ellos benceno, cloroformo y formaldehído, algunos de los cuales eran significativamente elevados. Esto dio lugar a un informe titulado “What’s in the Air” (Qué hay en el aire) y avivó la pasión de Penchom por el derecho de la comunidad a saber qué hay en el aire al que está expuesta.
“Se trata de crear un entorno de colaboración en el que las observaciones y las voces de la comunidad no sólo se escuchen, sino que se valoren, lo que conduce a una toma de decisiones más informada y a resultados positivos para todos. La pregunta más importante es cómo nos aseguramos de que se escuchan las voces de las comunidades”, dijo Penchom.
Yakarta, capital de Indonesia y hogar de más de 10,5 millones de habitantes, es una de las ciudades más contaminadas del mundo, según la empresa suiza de tecnología de calidad del aire IQAIR. Las principales fuentes de contaminación atmosférica de la ciudad son las emisiones del transporte, las instalaciones industriales y las centrales eléctricas de carbón de las provincias vecinas y las ciudades satélite.
En 2019, un grupo de 32 residentes de Yakarta, entre ellos Elisa, presentaron una demanda contra el presidente indonesio, Joko Widodo, y otros miembros del gobierno por inacción ante la contaminación atmosférica y negligencia ante los riesgos para la salud. Exigían que el gobierno local de Yakarta y otras regiones circundantes tomaran medidas serias para controlar la contaminación atmosférica.
En 2021, el tribunal dictaminó que los demandados habían desatendido el derecho de los ciudadanos a un aire limpio y ordenó la instalación de estaciones de control y otras medidas para mejorar la calidad del aire de la capital, pero aún no se han tomado medidas significativas. De hecho, Jokowi y sus ministerios presentaron un recurso en 2022, que fue denegado y la decisión se mantuvo.
Activista del desarrollo urbano, la preocupación de Elisa por la contaminación atmosférica comenzó cuando estaba embarazada en 2011 y se amplificó después de que le diagnosticaran cáncer en 2022. Sorprendida por los escasos antecedentes de cáncer en su familia, empezó a investigar la relación causal entre la contaminación atmosférica y el cáncer de mama.
Está haciendo cambios en su estilo de vida como individuo para combatir la contaminación atmosférica, pero cree que el papel del gobierno es el más importante a la hora de aplicar medidas de control de la contaminación.
“Me preocupan mis hijos. ¿Quién querría que sus hijos vivieran en estas condiciones? Quiero que tengan una vida mejor y un aire mejor que este”, afirma Elisa.
Sudáfrica – Aumentar la resistencia al cambio climático desde la base
La dependencia sudafricana del carbón para generar su electricidad ha provocado un asfixiante problema de contaminación atmosférica en el país, sobre todo en una franja industrializada de Highveld, una meseta en el centro de Sudáfrica. Un informe de Greenpeace de 2019 situaba a la región entre las más altas del mundo en emisiones de dos contaminantes peligrosos, el dióxido de azufre y el dióxido de nitrógeno. La mala calidad del aire ha tenido un enorme impacto en la salud de los millones de personas que viven en la zona.
Thabo Sibeko es Oficial Superior de Programas de Earthlife Africa. Es defensor del medio ambiente desde que movilizó a los jóvenes de su municipio en Gauteng para que utilizaran el reciclaje creativo como respuesta a la mala gestión de los residuos. Ahora le apasiona aumentar la resiliencia al cambio climático desde la base, garantizando que las comunidades locales estén bien informadas para que puedan tomar decisiones con conocimiento de causa en respuesta a la contaminación atmosférica y la crisis climática, y en la mesa de debate.
“Nuestro papel como catalizador en la sociedad es establecer el acceso a la información y allanarse el camino para que participen y deliberen en un diálogo que propicie el desarrollo de sus comunidades sin destruir el medio ambiente”, afirma Thabo.
La neblina se ha convertido en un problema habitual en Malasia, impulsada por la destrucción de las turberas y las prácticas agrícolas de tala y quema, tanto a nivel nacional como transfronterizo. En 2015, Malasia sufrió una grave contaminación por bruma, considerada una de las peores de la historia, que provocó el cierre de escuelas y afectó a la salud de muchas personas.
Helena Varkkey es profesora e investigadora sobre política y gobernanza medioambientales. Su interés por la bruma transfronteriza es tanto personal como profesional. Durante la bruma de 2015, su hijo tuvo que ser hospitalizado por problemas respiratorios. Su principal campo de investigación es la bruma transfronteriza y es vicepresidenta de CERAH, una organización de la sociedad civil que lucha contra la contaminación por bruma en Malasia.
En diciembre de 2021, Greenpeace Malasia presentó, junto con CERAH, una demanda histórica para el reconocimiento de los derechos humanos básicos a un aire limpio y libre de bruma. El resultado fue una mesa redonda sobre el tema en la Comisión de Derechos Humanos de Malasia.
“Tenemos que conseguir que un número suficiente de personas se den cuenta de que se están vulnerando sus derechos a un aire limpio, se preocupen por ello y se quejen. Es difícil, porque el aire limpio es sólo una cuestión que compite con muchas otras cuestiones medioambientales y sociales. Pero qué puede haber más importante que el aire que respiramos, ¿verdad?”.
República Democrática del Congo – Informar a la comunidad sobre la importancia del aire limpio
La República Democrática del Congo (RDC) se encuentra entre los tres países más contaminados de África Occidental y Central. Debido a la mala calidad del aire, las comunidades han sufrido problemas de salud; por desgracia, las mujeres, los niños y los ancianos son los más afectados. La contaminación atmosférica también ha afectado a la calidad del suelo y de los recursos hídricos.
Philemon Nzanzu Mulimirwa, un activo activista juvenil que lucha por el clima en la RDC, ha trabajado en la movilización y concienciación de su comunidad sobre la importancia del aire limpio. Es el vicepresidente de los jóvenes de su distrito, y trabaja junto a otras ONG para presionar a los responsables políticos a fin de que tomen medidas adecuadas para luchar contra la contaminación atmosférica.
“La participación civil en la defensa del clima es muy importante porque la contaminación atmosférica no tiene fronteras, afecta a todos sin distinción. Por eso siempre estamos llamados a trabajar juntos”, afirmó Filemón.
Como nos muestran estos héroes comunitarios, parte de la solución a la contaminación atmosférica somos nosotros, actuando juntos por un aire limpio.
Te compartimos algunas victorias destacadas (¡hay muchas más!) del ámbito de la justicia ambiental y climática para inspirarte y continuar luchando juntos por un mundo mejor y más verde.
Desde Greenpeace estamos orgullosos de haber contribuido a lograr diferentes avances a través de las campañas que impulsamos en todo el planeta.
Global – Tribunal Europeo ratifica el derecho de los activistas a manifestarse
Madrid. 05.10.13. Concentracion de activistas de Greenpeace en la Puerta del Sol, en protesta por la detencion de activistas en Rusia.
El 27 de junio, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos emitió su fallo en el caso de larga data de los Arctic 30 contra Rusia. En él se determinó que las autoridades rusas detuvieron de manera arbitraria a los 28 activistas de Greenpeace y a dos periodistas independientes, violando su derecho a la libertad de expresión.
El caso se remonta a septiembre de 2013, cuando el grupo conocido como los Arctic 30 fue detenido bajo sospecha de piratería después de que comandos rusos abordaron el barco de Greenpeace Arctic Sunrise y confiscaron la nave. Esto ocurrió tras una protesta contra la producción de petróleo en el Ártico, en el Mar de Pechora, frente a la costa norte de Rusia.
“El tribunal ha reconocido la verdad de que el activismo climático es necesario para proteger todo lo que nos es querido, afirmando que es ‘una expresión de opinión sobre un asunto de interés social significativo’, dijo Faiza Oulahsen, líder de la campaña de clima y energía de Greenpeace Países Bajos y una de los Arctic 30.
2. Estados Unidos – Jóvenes activistas ganan una demanda climática
El 14 de agosto, un grupo de 16 jóvenes de entre 5 y 22 años de Montana, Estados Unidos, ganaronla demanda judicial en la que argumentaron que el estado violó su derecho a un “ambiente limpio y saludable” al promover el uso de combustibles fósiles.
El veredicto del tribunal regional fue que una disposición de la ley ambiental de Montana dañaba el ambiente y a los jóvenes demandantes al impedir que se evaluaran los impactos climáticos de los proyectos energéticos.
Así, se suma otra victoria que podría sentar un precedente para futuras demandas relacionadas con el cambio climático.
3. África – La ciudadanía logra frenar la legalización de la tala de bosques
La Corte Medioambiental de Kenia falló a favor de la protección de los bosques tras escuchar la petición de Greenpeace Áfricafirmada por casi 40 mil personas que pedía al presidente William Ruto que no levantara la prohibición de la tala en el país.
En esta instancia, se detuvola implementación de la orden del gobierno de dejar sin efecto la prohibición de talar bosques comunitarios y públicos. Ahora, la ciudadanía va por más y busca que el presidente Ruto haga lo correcto y prohíba la tala en estos bosques para siempre.
Esta decisión judicial no sería posible sin el arduo trabajo de los miembros de la comunidad, la Sociedad de Abogados de Kenia, otras ONG ambientales, activistas climáticos y diferentes personas que apoyan la causa.
4. India – Acción sobre la crisis de la ola de calor
Greenpeace del Sudeste asiático obtuvo su primera victoria en la campaña Heatwave (Ola de Calor). Después de meses de pedir por la implementación de un plan de acción contra las olas de calor, la Autoridad de Gestión de Desastres de Delhi aceptó la propuesta y decidió avanzar en su aprobación.
Llegar al momento de formular el Plan de Acción contra Olas de Calor de Delhi (HAP por sus siglas en inglés), por parte de la Autoridad de Gestión de Desastres de Delhi, marca un paso preliminar importante hacia la mitigación de los desafíos relacionados con las olas de calor en la ciudad. Delhi, al ser una de las ciudades más calurosas de India, enfrenta desafíos únicos debido a su alta densidad de población y a las comunidades de bajos recursos.
5. Greenpeace Italia logra que se amplíe el acceso a la información ambiental
El 6 de julio, el Consejo de Estado, el nivel más alto de justicia administrativa en Italia, aceptó la solicitud de Greenpeace Italia de tener acceso a todos los actos, acuerdos y contratos (incluso financieros) entre la Corporación Nacional de Hidrocarburos (ENI por su nombre en italiano Ente Nazionale Idrocarburi), sus empresas, y la universidad pública Politécnico di Turín.
Gracias a esta sentencia sin precedentes, “ya no será posible que la Administración Pública limite el acceso a la información ambiental, siempre que atañe a elementos como el aire, la atmósfera, el agua o el suelo» , explicó Alessandro Gariglio, abogado de Greenpeace Italia.
El litigio judicial comenzó en marzo de 2021, cuando la organización solicitó documentación a las universidades e instituciones públicas -en base a la ley de acceso cívico generalizado- y sólo una respondió. El pedido de información buscaba determinar si la ENI influye (y en qué medida) en la investigación y la docencia de las universidades públicas, financiando programas y encargando investigaciones.
A partir de ahora, todo aquello que pueda ser de interés en materia ambiental debe ser accesible a cualquiera que lo solicite.
6. Australia da un paso más hacia vehículos más limpios
El gobierno australiano finalmente se comprometió a implementar un Estándar de Eficiencia de Combustible en el país. Esta normativa limitará las emisiones promedio totales en todos los automóviles vendidos por los fabricantes, promoviendo el desarrollo y la venta de vehículos eléctricos más accesibles.
Greenpeace Australia Pacífico respaldó este pedido hasta lograrlo, sumando voces de activistas al proceso de consulta del gobierno sobre la importancia de una estrategia de vehículos eléctricos.
La organización ahora está pidiendo al gobierno que implemente estándares estrictos, legislados y obligatorios, sin ceder a la presión de los cabilderos.
Esperamos que estas buenas noticias te renueven la alegría de saber que la lucha por un mundo mejor genera resultados siempre .
Los libros son muchas cosas a la vez: aliados que nos permiten habitar en la piel de otros seres, ver con otros ojos y conocer lugares lejanos. También son alimento para la imaginación y sosiego en días difíciles. Y, por supuesto, fuente inagotable de conocimiento.
En particular, en esta nota nos dedicamos a la literatura sobre temas ambientales. Al ser tan prolífica, son tantos los títulos y autores por conocer que, a veces, puede resultar difícil elegir qué leer.
Por eso, seleccionamos 6 libros para que sumes a tu biblioteca:
1.“Toda ecología es política” de Gabriela Merlinksy
Una mirada latinoamericana de los conflictos socioambientales y una invitación a repensar cómo se encaran las problemáticas ambientales. Escrito por una científica argentina con especialización en gestión del riesgo.
2. “10 pasos para salvar al planeta” – Mariana Matija
Este libro es el compendio de la experiencia y aprendizajes en torno a la sostenibilidad y el proceso de aprender a vivir de otra manera de la activista colombiana. En sus propias palabras, este libro es también una forma de “entenderme como parte (pequeñísima pero igual esencial) del equilibrio de la biósfera”.
3. “Saving Us“ – Katharine Hayhoe
Katharine Hayhoe es una científica del clima de renombre internacional. Hay quienes opinan que esta obra podría resultar en una expansión masiva del interés en el cambio climático.
Hayhoe es una hábil oradora pública y “Saving Us” es un seguimiento de su magnífica charla TED en 2018, “Lo más importante que puedes hacer para combatir el cambio climático: hablar al respecto”.
Es una entretenida clase magistral sobre la ciencia de la comunicación, que no se guarda nada sobre la amenaza que enfrenta la humanidad o el tamaño de la tarea para evitar consecuencias catastróficas.
4. “La historia de las cosas” – Annie Leonard
Un clásico ya de la literatura ambiental. En el libro La historia de las cosas Leonard (quien desde 2014 es directora ejecutiva de Greenpeace en Estados Unidos) aborda con gran profundidad las etapas de la economía de los materiales (extracción, producción, distribución, consumo y eliminación), ilustrándolas con ejemplos de todo el mundo.
En este sentido, también comparte sus historias de viaje por Bangladesh, Sudáfrica, India y otros países, visitando las fábricas donde se producen nuestras COSAS y los vertederos donde son depositadas.
Cabe destacar que la edición de La historia de las cosas es en sí misma un ejemplo de cómo producir impresos reduciendo el impacto ambiental. Este libro no solo describe cómo podemos hacer las cosas de un modo diferente, sino que es un modelo de ello.
5. “(Re) Calientes” – Mariana Aizen, Laura Rocha y Pilar Assefh
Un abc sobre el principal desafío de nuestro siglo para comprenderlo y, lo más importante, pasar a la acción. Escrito por tres periodistas argentinas.
6. “El libro del clima” – Greta Thunberg
Compila el aporte de expertos y referentes alrededor del mundo sobre la crisis climática. Compilado por la activista sueca Greta Thunberg.
Estamos seguros que disfrutarás mucho de estos títulos así que guarda esta selección para tenerla a mano la próxima vez que estés en duda con qué libro seguir