Se trata de más de 200 toneladas de salmones con ISA que están siendo procesados en una factoría de la Región de Magallanes, para luego ser comercializados en el mercado nacional y/o internacional. Esta cantidad de ejemplares infectados y procesados para consumo humano podría triplicarse, porque son 600 las toneladas que Acuimag tiene en el centro que registra el brote viral.

Frente a esto el director del Centro Ecoceanos, Juan Carlos Cárdenas, afirmó que el “Ministerio de Salud debe prohibir inmediatamente la comercialización y consumo de peces de cultivo industrial infectados”. Mientras el Secretario General de la Liga Ciudadana de Defensa del Consumidor, Omar Pérez Santiago, agregó que el Servicio Nacional del Consumidor (Sernac) “debe alertar a la población sobre la existencia de un virus presente en estos salmones”.

En tanto, el senador Guido Girardi se sumó al llamado de prohibición de venta de estos productos y a realizar estudios de presencia de residuos de antibióticos en estos salmones. Cuestión que apoya además el senador Pedro Muñoz, quien afirmó que “debe impedirse que los especimenes contaminados lleguen al consumo humano”.

El senador Muñoz argumentó que “mientras no exista evidencia científica concluyente de su inocuidad para la salud humana, las autoridades sanitarias deben evitar cualquier riesgo para la comunidad”. Demanda que es apoyada por el Concejal por Punta Arenas, Mario Pascual, quién viajó a Santiago a buscar respuesta del Gobierno acerca de esta situación “porque las autoridades en Magallanes han guardado silencio frente a las irregularidades que hemos denunciado, respecto a la comercialización para consumo humano de estos salmones infectados”.

CRITERIO PRECAUTORIO Y PROTECCION DE SALUD PÚBLICA
Las organizaciones y representantes ciudadanos entregaron una carta al Ministro de Salud en la que exigen aplicar el criterio precautorio y la Ley del Consumidor frente a la potencial venta de estos salmones infectados. El director del Centro Ecoceanos, Juan Carlos Cárdenas, afirmó que “en virtud de la aplicación del principio precautorio y la necesidad de la defensa de la salud pública, solicitamos al Ministerio de Salud la prohibición inmediata de comercialización y consumo de peces de cultivo industrial infectados, provenientes de brotes de virus ISA, hasta no contar con las evidencias científicas que aseguren su inocuidad”.

“Por ello es urgente se refuercen las acciones normativas y del sistema de fiscalización para el control sanitario de esta industria y el aseguramiento de la inocuidad de dichas producciones de acuicultura industrial”, dijo Cárdenas.

En la entrega de la carta también estuvo el concejal de Punta Arenas Mario Pascual quién afirmó que “viaje a Santiago en busca de alguna respuesta por parte del Gobierno, porque las autoridades en Magallanes han guardado silencio frente a las irregularidades que hemos denunciado, respecto a la comercialización para consumo humano de más de 200 toneladas de salmones infectados, ilegalidades de la empresa del centro de cultivo responsables del primer brote de virus ISA, por sobreproducción que triplica lo permitido, y el uso de un incinerador para la mortalidad de peces que no cuenta con los permisos ambientales”.

BASURALES, INCINERADORES, SOBREPRODUCCION
Pascual, quien preside la Bancada Verde de concejales de Magallanes, señaló que “existe además un problema de tipo sanitario, porque Magallanes no cuenta con rellenos sanitarios para recepcionar la alta mortalidad de peces que está causando este virus. No podemos permitir la comercialización de estos salmones en nuestro país, ni en el extranjero”

El Senador Pedro Muñoz dijo que “el brote de ISA en Magallanes ha demostrado que la preocupación que hemos sostenido por la instalación masiva de plantas de salmonicultura en la región es real. La acuicultura es una amenaza latente para el turismo y la pesca artesanal de la Región y también para toda la población que verá afectada su calidad de vida.”

El legislador de Magallanes afirmó que “es imprescindible que se adopten las medidas sanitarias que permitan, por una parte, la disposición adecuada y con cargo a los responsables de los ejemplares muertos; en tanto, por otra, debe impedirse que los especimenes contaminados lleguen al consumo humano. Mientras no exista evidencia científica concluyente de su inocuidad para la salud humana, las autoridades sanitarias deben evitar cualquier riesgo para la comunidad”.

UNA INDUSTRIA IRRESPONSABLE
El senador Guido Girardi aseguró que “no se puede comercializar la partida de salmones infectados con virus ISA, y segundo la autoridad debe iniciar los estudios sobre aplicación de los antibióticos, y resistencia bacteriana”.

“Hay una intensión directa y premeditada de no regular, ni controlar esta industria. Hay una negligencia, una liviandad, una falta de comprensión del problema”, alegó el senador.

Giradi agregó que “lamentablemente esta actividad destruyó el ecosistema de la región de los Lagos, y ahora se les permitió expandirse a la Patagonia a Magallanes. El problema es que se va a exportar la crisis, la contaminación las malas prácticas, la aplicación de antibióticos y era evidente la aparición de brote de virus ISA”.

POTENCIAL SUSHI CON VIRUS
Omar Pérez Santiago, de la Liga Ciudadana de Defensa del Consumidor, dijo que “el Director del SERNAC hace unos días alertó a la población sobre las llamadas pulseras mágicas, por su falta de comprobación que tengan efectos saludables. Nosotros creemos que del mismo modo como ha actuado frente a situación, debe alertar a los consumidores sobre la existencia de un virus presente en los salmones provenientes de Magallanes”.

Además, el dirigente “llamo a los restaurantes y negocios de sushi que informen a sus clientes la procedencia de los salmones, que sirven en sus mesas. Es una precaución necesaria frente a este emergencia sanitaria”.