El conflicto por la administración del agua entre las empresas hidroeléctricas y las asociaciones de regantes en la cuenca del río Maule, se convirtió en una verdadera guerra que enfrenta a las gigantes Colbún y Endesa, con los asociados a la Junta de Vigilancia de este cauce.
Ahora el tema llegó hasta la Justicia, luego que unos 1.500 productores que pertenecen a la Asociación Canal Maule, una de las entidades que integra la citada Junta de Vigilancia, dejaron de recibir agua afectando a cerca de 50 mil hectáreas que hoy no tienen riego, ni agua para el ganado.
“Colbún maneja las bocatomas y toma el agua que Endesa usa en la Laguna del Maule y entrega al río, antes de que llegue a ‘Armerillo’, el punto donde la asociación puede distribuirla para uso de riego e hidroeléctrico y la lleva directo al embalse Colbún, lo que provoca el problema a los usuarios del canal Mauleâ€, explicó el titular de la Dirección General de Aguas (DGA), Rodrigo Weisner, quien está mediando entre los usuarios para aunar posiciones.
Para corregir esta situación y cansados de lo que califican como una actitud “abusiva†por parte de las generadoras, el martes 15 de abril la Asociación Canal Maule dio un primer paso y presentó ante la Corte de Apelaciones de Talca un recurso de protección contra Pehuenche, filial de Endesa, la que estaría encargada de entregarles el agua.
“Cuando, como ahora, el embalse Colbún se queda sin agua porque la empresa está generando a toda capacidad, el Canal Maule se queda sin agua porque su bocatoma está más arriba del nivel del embalseâ€, explicó el presidente de la Junta de Vigilancia del Maule, Gustavo Rivera.
El dirigente agregó que el problema surge a partir de la interpretación disímil de la sentencia de un juicio que las enfrentó hace un tiempo. “Ambas empresas se sienten vencedoras. Lo que dice Colbún es que si el canal no alcanza a captar agua porque el embalse está muy bajo, Pehuenche debe proporcionar el agua. Sin embargo, Endesa dice que si el caudal no alcanza Colbún debe suplementar el agua. En este minuto ninguna de las dos empresas les está dando soluciónâ€, dijo el dirigente.
Weisner señaló que tanto la DGA como la Dirección de Obras Hidráulicas (DOH) del Ministerio de Obras Públicas (MOP), están mediando entre las partes e insistiendo ante las hidroeléctricas para que cambien su interpretación, porque a juicio de la autoridad las aguas que se extraen de la Laguna del Maule no sólo tienen fines hidroeléctricos.
Tensión en el Laja
La cuenca del río Laja, en la Región del Bío Bío, también ha sido escenario de conflictos y tensiones entre los usuarios. En la DGA explicaron que en este caso los roces no son tan notorios porque en esta zona aún no se conforma una junta de vigilancia.
Al mismo tiempo, se espera que en los próximos días el MOP autorice un nuevo convenio de flexibilización de uso de agua para el embalse Laja, que permitirá a Endesa adelantar el retiro de agua desde esa reserva, reemplazando hasta fines de mayo el convenio que expiró el 31 de marzo.
El titular de la DOH, Juan Antonio Arrese, dijo que en esta oportunidad la solicitud se elevó solamente para este embalse y no para la Laguna del Maule porque el sistema eléctrico estaría en un mejor pie gracias al buen resultado de las campañas de ahorro.
Rivera rebatió esta visión, pues, a su juicio, Endesa preferiría no adelantar el retiro de agua para no llegar a los 670 millones de m3, cota bajo la cual el 80% del agua es de riego y por ello debe negociar con los regantes, los que también le pidieron al MOP formar parte de este convenio y así decidir cuál será el destino de esas aguas. Consultadas las empresas aludidas, éstas declinaron referirse al tema.
Fuente: El Diario Financiero