La Asociación de Reciclajes del Reino Unido aseguró que el paquete tiene elementos que hacen difícil su reutilización.
Los envases de las papas fritas Pringles representan un problema para el reciclaje. Debido a su composición en base a varios materiales, el procesamiento para su reutilización presenta una serie de dificultades.
De acuerdo con la Asociación de Reciclajes del Reino Unido, el cartón, plástico y metal desprendible de su tapa, sumados a su base también de metal, hacen casi imposible descomponerlo en todas las partes necesarias para reciclarlo.
Kellogs, dueño de Pringles, asegura que el envase tiene sus ventajas: mantiene las papas frescas durante un amplio período de tiempo. Sin embargo, no se cerraron a implementar nueva tecnología para mejorar su envase.
Este problema que fue presentado hacer dos años atrás, lamentablemente sigue y actualmente no tiene solución. Existen soluciones como manualidades, pero no solucionan el problema de fondo.
Fuente: ChileCologigo